El reconocimiento es una parte importante en el que se apoya un ambiente cordial, agradable, saludable y de aprendizaje. Aún así, no estamos acostumbrados a dar reconocimiento cuando el equipo, nuestros compañeros o personas cercanas a nosotros están haciendo un buen trabajo.
En los entornos laborales en los que acompaño como profesional en la transformación y gestión de equipos, el reconocimiento es una de las herramientas en las que hago más hincapié que se potencie, sobre todo en los líderes, para conseguir empleados más comprometidos y satisfechos de pertenecer a la empresa.
Por qué es importante
El reconocimiento sincero es una habilidad que, bien usada, fortalece los cimientos de la persona que lo recibe. Cuando reconocemos a alguien vemos a la persona auténtica que está realizando el trabajo y, de esta manera, le apoyamos y premiamos que siga en el camino de lo bien hecho.
Por un lado, es frecuente cuando hablo con los empleados de las empresas en las que trabajo el comentario “de vez en cuando te gusta que te den una palmadita” “a todos nos gusta que nos digan si estamos haciendo bien las cosas”, “a mi me gustaría sentir reconocimiento por parte de mi jefe”.
Por otro lado, me encuentro a jefes que, al principio de nuestro acompañamiento en coaching empresarial, les cuesta dar reconocimiento. Recuerdo frases “si les digo que lo hacen bien, luego me lo están repitiendo constantemente” o “yo no comento ni lo que hacen bien, ni lo que hacen mal”.
Sin embargo, está demostrado que, estos mismos jefes que, al principio son reticentes a dar reconocimiento, con el proceso de mejora e innovación en las relaciones de los equipos de trabajo, cuando aprenden y practican está habilidad, me transmiten lo orgullosos que se sienten con el paso del tiempo de haberla incorporado en su gestión de equipos.
En este momento, dejan de ser jefes para convertirse en líderes.
Recuerdo la satisfacción que sentía el director general de una empresa de más de 100 trabajadores cuando incorporó el reconocimiento, primero en sus equipos, después a sus clientes, proveedores y también en su vida cotidiana y personal. Y, la sorpresa que detectaba por parte de la persona que recibía el reconocimiento verbal y no verbal de los aspectos positivos de su rendimiento, de su actitud o de su comportamiento.
Si deseas mejorar en el aspecto el compromiso, confianza y satisfacción de pertenencia al equipo, empresa, grupo o familia, practica el reconocimiento.
Práctica el reconocimiento
Para ello,
- Haz una lista con los nombres de cinco personas de tu equipo, compañeros, amigos o familiares y escribe un reconocimiento que exprese quiénes son o quiénes han sido para llegar al lugar donde están hoy.
- Escribe entre tres y cinco reconocimientos para ti mismo.
Recuerda, reconocer fortalece los cimientos de la otra persona o de ti mismo y permite realizar las cosas con más confianza y motivación.
