Qué bien me viene contaros el miedo e inseguridad que tuve el pasado lunes en una charla sobre “Miedos y creencias que nos frenan”. Qué ironía dar una charla sobre miedos y sentirlos yo, siendo coach que trabaja este tema, muy a menudo.
Diez minutos de inseguridades que me vienen estupendamente para hablaros de cómo se puede afrontar desde la experiencia propia.
Una vez que ha pasado, extraigo lo positivo de este momento, mi manera de impartir formación es a través de vivencias propias o cercanas. Por este motivo, haber vivido este momento es un regalo para acompañar en mis formaciones de hablar en público desde las experiencias agradables y desagradables.
Os pongo en situación
La semana pasada acudí muy emocionada y contenta al pueblo de mi padre Malón (Zaragoza) a impartir una charla sobre los miedos y creencias que nos frenan.
Mi emoción era muy grande. Viajo mucho y doy esta charla por muchos lugares, se que gusta y ayuda a cambiar la perspectiva de asuntos que nos preocupan de una manera más positiva.
Saber que los vecinos de Malón iban a escucharla y vivirla me alegraba enormemente. Sin embargo, mientras estaba preparando la sala con el proyector, sonido… comenzaron a llegar y llegar personas, muchas de ellas conocidas por mi o por mi familia. Es entonces cuando todo cambió y comenzaron a llegar mis inseguridades.
Mis inseguridades
Comencé a escuchar mi voz saboteadora y me soltaba frases del tipo
“Esta charla conecta con la gente pero aquí igual no les gusta”
“Han venido tus padres, tus tíos, primos, amigos …. como no te salga bien vas a quedar fatal”
“Y si después de venir tanta gente les aburres”
En fin, toda una serie de frases que se estaban apoderando de mi seguridad.
Este miedo hablar en público me llegó al sentirme evaluada por gente conocida
Dos elecciones
Elegir no. No afrontarlo y seguir nerviosa e insegura toda la charla
Elegir si. Afrontarlo con valor.
Elegí SI y le eche un pulso al miedo e inseguridad
De esta manera luché contra
- el qué pensarán de lo que cuento
- qué ocurre si a alguien no le gusta
- y si no lo consigo
El miedo
Es valioso, nos indica la desproporción entre la amenaza que te enfrentas y los recursos con los que cuentas.
Es una alerta que nos permite desarrollar nuestros recursos internos para abordar las situaciones que tenemos.
¿Cómo lo conseguí?
Pensar en la amenaza con la que me enfrentaba
Hablar a un público conocido
Buscar mis recursos internos
Tenía la charla muy bien preparada
Había impartido la charla más de 10 veces
Sé que lo que cuento es ameno
Disfruto mucho de lo que cuento
Doy pautas para llevar las riendas de la vida
Conclusión del análisis
La amenaza era desproporcionada con los recursos que yo tengo. Le estaba dando un valor superior a hablar a un público conocido por encima de quién soy yo como coach y formadora impartiendo esta charla.
El poder lo tengo YO y la decisión de conseguirlo también.
Fueron diez minutos complicados mientras saludaba a todas las personas que iban llegando y me iban diciendo vengo porque eres tú o venimos para ver que nos cuentas o tenía muchas ganas de verte en una charla …
Control del miedo escénico
Lo controlé después de entrenar habilidades que hace que ponga en valor recursos que contribuyen a reforzar mi confianza y comodidad necesaria para hablar en público, en este caso público conocido.
Todas mis inseguridades y miedo escénico que sentí durante esos diez minutos mientras recibía a los asistentes, se desvanecieron en cuanto pronuncié las primeras palabras.
Las sensaciones y feedback de las personas presentes – charla emocionante que les encantó y ayudó a entender un poco más lo que piensan, como les afectan y como lo pueden mejorar.
Feliz de haber sido invitada a Malón a dar una charla por su Semana Cultural. Muchas gracias a todos los que acudieron y a los que no pudieron también.
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